La
acción de orinar se denomina micción y está controlada por el sistema
nervioso. La continencia urinaria es una función básica que se adquiere
a partir de los 2-3 años de edad y que, en ausencia de fenómenos patológicos,
debe mantenerse hasta las edades más avanzadas. La incontinencia urinaria
( IU) se define como la "pérdida involuntaria de orina que conlleva un
problema higiénico y/o social, y que puede demostrarse objetivamente".
La
incontinencia urinaria es muy frecuente, sin embargo estadísticamente
no lo parece ya que a muchas personas les da vergüenza comentarlo y buscar
ayuda. Por esto es importante que podamos ofrecer la información de que
muchas mujeres y muchos hombres han recibido tratamiento eficaz y han
mejorado de este problema de salud.
Las
Causas
La
IU no es algo que tenga que aparecer normalmente en las personas de edad
avanzada. La IU puede aparecer a cualquier edad y puede ser el
resultado de diferentes problemas físicos. Con frecuencia la IU
es transitoria (es decir que aparece durante tiempo limitado), y se puede
controlar con tratamientos sencillos. Algunas de las causas de la IU
son:
-
Infección de las vías urinarias.
- Irritación o infección
vaginal.
- Estreñimiento, impactación
fecal.
- Efectos secundarios de algún
fármaco.
En
otros casos la incontinencia puede ser el resultado de otros problemas
que no son temporales. Tal como ocurre en:
-
La debilidad de los músculos que sostiene la vejiga en su lugar.
- La debilidad de la vejiga misma.
Debilidad de los músculos del esfínter de la uretra.
- El aumento de la actividad de
los músculos de la vejiga.
- El bloqueo de la uretra urinaria
(por agrandamiento de la próstata).
- Problemas hormonales de la mujer.
- Diabetes.
- Algunos trastornos neurológicos.
- La inmovilidad (generalmente asociada
a enfermedades degenerativas crónicas).
- Alteraciones cognoscitivas.
Por
otra parte, el hecho de no poder aguantar las ganas de orinar no tiene
efectos secundarios propiamente dichos, pero sí una serie de inconvenientes
que pueden derivarse de este trastorno:
-
Erupciones y sarpullidos.
- Infecciones en la piel.
- Inflamaciones.
- Infecciones en los conductos urinarios.
- Problemas para dormir.
- Problemas para relacionarse socialmente.
- Disminución de la actividad
sexual.
- Depresión.
La
IU afecta a unos dos millones de personas en España y genera un
coste médico de unos 60.000 millones de pesetas, el 40 % del cual se dedica
a compresas absorbentes. Este problema puede tenerlo personas de todas
las edades, tanto hombres como mujeres, aunque el 75 % de los afectados
son mujeres. También es más común en personas mayores, el 35 % de las
mujeres y el 15 % de los hombres mayores de 60 años la padecen. La prevalencia
es difícil de precisar, ya que por sus características es un síntoma que
pretende ocultarse. En pacientes ancianos ingresados en residencias oscila
entre el 45 y 50 %. Muchas personas mayores consideran que la incontinencia
es una consecuencia normal del envejecimiento y se sienten avergonzados
(lo que produce su aislamiento y desconexión social), aunque diversos
estudios han demostrado que un 80% de las personas afectadas pueden curarse
completamente o aliviar su situación en gran medida.