Picaduras
de otros Insectos e Insectos Voladores
En este grupo incluimos todos aquellos insectos que abundan en nuestro
medio como abejas, abejorros, tábanos, mosquitos, etc. Como sabemos, su
presencia en verano aumenta llamativamente y llega a ser tremendamente
molesto.
La
picadura de estos insectos generalmente no encierran gravedad, produciendo
habitualmente una reacción local con dolor, picor e inflamación.
Algunas de estas especies como la abeja, dejan el aguijón clavado.
Las
picaduras de abejas, avispas y algunas hormigas producen dolor local y
tumefacción, qué pueden ser graves sin son masivas ó
afectan a la boca ó la faringe produciendo edema de glotis (con
cierre de la via respiratoria y asfixia).
Una picadura directa
sobre un nervio periférico puede anular su función durante
un tiempo.
Ademas, un 10% de
la población muestra hipersensibilidad al veneno de estos insectos
y puede desarrollar una reaccion generalizada a estos venenos (ANAFILAXIA).
Tratamiento
En
los casos leves basta con extraer cuidadosamente el aguijón y aplicar
una pequeña cantidad de amoniaco de uso doméstico en la
zona (Afterbite ®).
A
veces puede ser util la administración de antihistamínicos
por via oral.
En
casos graves y dónde las manifestaciones empiezen a ser más
evidentes (sensación de adormecimiento de la lengua y cavidad oral,
dificultad para respirar,y mal estar general) es conveniente acudir al
centro medico más cercano. Se puede aplicar un torniquete para
disminuir la absorción del veneno y hielo para aliviar el dolor,
pero la valoración debe ser médica.
Los
mosquitos y los tábanos pican para alimentarse de la sangre de
los mamíferos, mientras que las abejas y las avispas lo hacen para
defenderse. Las abejas clavan el aguijón y mueren, en tanto que
las avispas conservan el aguijón y pueden picar varias veces. Las
pulgas dejan una línea de picaduras a su paso, más a menudo
en las extremidades. Las chinches causan varias picaduras agrupadas, sobre
todo en las nalgas y las piernas. Las orugas elaboran una sustancia en
sus pelos que, al contactar con la piel, produce lesiones de tipo habón.
Actuación
en caso de picadura
1.
Lavar
la picadura con un antiséptico, o en su defecto, con agua y jabón.
2.
Aplicar
hielo o compresas frías o con amoniaco para reducir la inflamación.
3.
Extraer
el aguijón de la abeja con unas pinzas para evitar que se rompa
y se libere el veneno, siempre que no esté tan incrustado que su extracción
nos exija manipular demasiado la herida, en cuyo caso habrá que acudir
a una consulta médica o de enfermería.
4.
Aplicar
una crema para picaduras. En caso de que la reacción local sea demasiado
intenso, es aconsejable acudir al médico para que nos administre la medicación
más adecuada.
Prevención
1.
Utilizar
repelentes de insectos.
2.
Cubrirse
convenientemente los brazos y las piernas en aquellas zonas donde abundan
los insectos, sobre todo por la noche.
Casos
Graves y Recomendaciones Generales
1.
EN NIÑOS MENORE DE 6 AÑOS siempre es recomendable consultar
al médico.
2.
En todos los casos de picaduras es recomendable estar vacunados contra
el TETANOS.
3.
Aunque la mayoría de estas picaduras tienen carácter leve,
ante cualquier signo de gravedad (vómitos, mareo, ansiedad, sudoración,
taquicardia, o ante síntomas exagerados locales (gran inflamación
o gran dolor), se debe acudir al médico de inmediato.
4.
La picadura de un insecto puede no ser grave, pero la de muchos de ellos
sí.
5.
OJO
si nos ataca toda una colmena de avispas, un banco de medusas o similar,
la reacción puede ser muy grave. Debemos consultar al médico
lo antes posible.
Cualquier
tipo de picadura de las de aquí descritas se pueden transformar
en "ESPECIALMETE GRAVES" si la persona afectada es alérgica
a la misma. En estos casos debemos trasladar al paciente lo antes posible
a un centro de urgencias.