Se
conoce como "Golpe de Calor" al fracaso de la función
de diferentes órganos internos, secundario a una elevación
extrema de la temperatura corporal como consecuencia de un fracaso de
la termorregulación, es decir, se produce cuando la regulación
de la temperatura es incapaz de disipar la acumulación del calor
corporal. Es la alteración más grave de la regulación
térmica. Se trata de una emergencia que pone en peligro la vida
si no se actúa de forma inmediata.
El
cuadro se desarrolla al producir una persona una cantidad de calor que
no es eliminable por el sistema de refrigeración del organismo
( dilatación de los vasos sanguíneos superficiales y sudoración
) bien porque la producción de calor corporal sea excesiva, bien
porque la temperatura ambiente sea muy elevada o bien porque los mecanismos
de eliminación de calor no funcionen perfectamente, aunque lo más
común es una combinación de los tres. Las personas en mayor
riesgo son: niños menores de 5 años, personas mayores de
65 años, personas de mucho peso, personas en una actividad que
requiere mucho esfuerzo y personas que están enfermas o tomando
determinados medicamentos.
Son
múltiples los factores que pueden predisponer a que ocurran estos
fallos en la regulación térmica, facilitando que se originen
enfermedades por calor. Entre ellos podemos citar algunos tales como:
-
Temperatura y grado de humedad ambiental elevados.
- El viento:
al disminuir la aireación se dificulta la evaporación
del sudor.
- Falta de
aclimatación al calor, sobre todo en ancianos y niños.
- Ingesta
de líquidos insuficiente.
- Obesidad.
- Enfermedades
que dificulten la sudación como la diabetes, la insuficiencia
cardíaca y otras.
- Aumento
de la producción endógena de calor por distintas causas
como el ejercicio físico o algunas enfermedades.
- El consumo
de determinados fármacos como antihistamínicos, diuréticos,
betabloqueantes y otros.
- Intoxicaciones
etílicas.
- La vestimenta:
más perjudicial las oscuras y gruesas.
Síntomas
Casi
siempre el inicio del cuadro es brusco. Algunos enfermos, sin embargo,
refieren síntomas de inicio poco específicos, como debilidad,
somnolencia diurna, mareos, dolores de cabeza y calambres musculares.
Cuando
el golpe de calor ya se ha instaurado se caracteriza por los síntomas
siguientes:
- Temperaturas muy elevadas ( 39.5º C en la boca).
- Tensión
arterial elevada al principio (amplia separación entre la máxi-ma
y la mínima).
- Piel roja,
caliente y seca (sin sudor).
- Pulso acelerado
y más fuerte de lo normal y respiración acelerada.
- Dolor palpitante
de cabeza.
- Mareo, nausea,
confusión.
- Síntomas
neurológicos como agitación psicomotriz, crisis convulsiva
o déficit motor.
- Alteraciones
renales y grave afectación hepática días después
de la presentación del cuadro sobre todo si éste se mantuvo
más de 4 horas sin tratamiento.
Primeros
Auxilios
Tras
avisar a los servicios de urgencias y mientras esperamos su llegada, debemos
iniciar medidas físicas de enfriamiento en todas las personas con
fiebre elevada y alteración de la conciencia en las que sospechemos
este cuadro.
Primeramente
debemos situar al paciente decúbito supino, es decir, tumbado “boca
arriba”, con la cabeza ligeramente elevada y por supuesto en un
ambiente fresco alejado de fuentes de calor.
Habrá
que proceder a enfriar al individuo mediante baños de agua fría
o por la aplicación de compresas frías o incluso con hielo,
mientras que masajeamos la piel para combatir el espasmo vascular. Nuestro
objetivo debe ser reducir la temperatura rectal, al menos hasta los 38º.
Si
la persona se encuentra consciente hay que procurar que reponga líquidos
y sales, para lo cual lo más cómodo hoy día es administrar
bebidas isotónicas de las que actualmente disponemos en el mercado,
o bien preparar una solución con un litro de agua, el zumo de 2
ó 3 limones, una cucharada de sal y dos de bicarbonato (se puede
añadir un poco de azúcar) Nunca administraremos bebidas
alcohólicas.
Es
aconsejable ir realizando controles periódicos de la temperatura
corporal, tensión arterial y de pulso.
Primeros
Auxilios
Como
la mayoría de las patologías, en el caso del golpe de calor,
lo ideal es EVITAR que se produzca. Para ello, son bueno las siguientes
recomendaciones:
-
No realizar actividades deportivas o esfuerzos físicos importantes
durante los horarios en donde el calor ambiental es más alto.
-
Usar ropas apropiadas, permitiendo la mayor cantidad de piel expuesta
al ambiente para facilitar la evaporación del sudor. La ropa
debe ser delgada, no apretada y de colores claros.
-
Tome mucho líquido, especialmente si está haciendo un
gran esfuerzo físico. Son aconsejables las bebidas que permiten
reponer sales minerales (bebidas isotónicas) se debe evitar las
bebidas alcohólicas, con cafeína o excesivamente azucaradas.
-
Si va a estar expuesto al sol, utilice protección (sombrero,
sombrilla, crema protectora, etc.)
-
No deje a niños o animales en autos con las ventanillas cerradas.
En general nadie debe permanecer en lugares cerrados y sin ventilación
cuando hace calor.
-
Ante los primeros síntomas que puedan hacer pensar que el calor
le está afectando, tome las medidas adecuadas fundamentalmente
de hidratación y evitación del calor.